En España el monstruo de dos cabezas pierde más de cinco millones de
votos. Ascenso de la izquierda, grito de indignación de la calle directo al Parlamento
Europeo. SÍ, SE PUEDE. Lo más peligroso es el lamentable ascenso de la
ultraderecha en Francia, Dinamarca, Grecia y Austria. Muy peligroso.
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